Un control de tránsito realizado este mediodía en la intersección de Ruta 40 y Beschtedt reveló una situación alarmante: un conductor circulaba con más de 3 gramos de alcohol por cada 100 mililitros de sangre. Desde la Municipalidad advierten sobre los peligros de esta conducta y refuerzan el mensaje de alcohol cero al volante.

En un operativo de rutina llevado adelante por inspectores de la Subsecretaría de Tránsito y Transporte de la Municipalidad de San Carlos de Bariloche, se detectó este mediodía una infracción que podría haber terminado en tragedia. El hecho ocurrió cerca de las 12:30 en el cruce de Ruta 40 y Beschtedt, donde un conductor fue sorprendido con una concentración de alcohol en sangre superior a los 3 gramos por cada 100 mililitros, una cifra exorbitante y extremadamente peligrosa.

Este nivel de alcohol en sangre no solo excede ampliamente los límites legales, sino que además implica un altísimo grado de deterioro de las capacidades para conducir. Según advierten especialistas, con tal cantidad de alcohol en el organismo, el conductor experimenta pérdida severa de reflejos, descoordinación motriz, visión alterada y un nivel de riesgo crítico tanto para su vida como para la de los demás.

Lo que más llama la atención y preocupa a las autoridades es que este caso se registró en pleno mediodía, horario de gran circulación vehicular y peatonal. La presencia de un conductor en estado de ebriedad en ese contexto multiplica las probabilidades de provocar un accidente grave o fatal.

Desde el área de Tránsito y Transporte insisten en la necesidad de tomar conciencia sobre la responsabilidad que implica manejar un vehículo. El consumo de alcohol y la conducción son una combinación mortal, y es fundamental que la comunidad comprenda que al volante, el único nivel seguro de alcohol es cero.

Finalmente, las autoridades remarcan que los controles de alcoholemia continuarán realizándose de forma intensiva en distintos puntos de la ciudad, y apelan a la colaboración de la ciudadanía para erradicar este tipo de conductas que ponen en juego la seguridad de todos. Conducir sobrio es una decisión que salva vidas.