Bariloche Pone a Prueba el Compromiso Vial en el Día del Cinturón

Con una metodología dinámica y preventiva, la Subsecretaría de Tránsito y Transporte, junto a la ANSV y fuerzas de seguridad, impulsaron una jornada crucial para recordar que la vida y la diversión en la ruta dependen de cumplir las reglas.

En el marco de la conmemoración del Día Mundial del Uso del Cinturón de Seguridad, la ciudad de San Carlos de Bariloche se convirtió en el escenario de una significativa acción de concientización. Lejos de la rutina, la jornada adoptó un enfoque original y directo para interactuar con los protagonistas de nuestras calles: los conductores.

La iniciativa fue encabezada por la Subsecretaría de Tránsito y Transporte de la Municipalidad, trabajando de manera articulada con la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), inspectores de tránsito y la policía caminera. Esta colaboración subraya la importancia de un esfuerzo mancomunado para resguardar la vida en el tránsito.

El punto elegido para la actividad fue estratégico: en cercanías de la rotonda del Aeropuerto, una vía de acceso y egreso fundamental que concentra el flujo de residentes y visitantes. Allí, el equipo de prevención desplegó una metodología que trascendió la simple entrega de material informativo.

A los conductores se les propuso un “test rápido” sobre sus conocimientos viales. Mostrando diversas señales de tránsito, se les pedía que identificaran su significado y recordaran las velocidades máximas estipuladas. Este lado lúdico de la actividad buscó generar una reflexión genuina, demostrando que la seguridad en la vía es, en esencia, un juego cuyas reglas deben conocerse al detalle.

Esta dinámica puso en evidencia la importancia de conocer y aplicar las normas de tránsito. El dominio de la señalética y los límites de velocidad no son meros requisitos burocráticos, sino herramientas esenciales que definen la capacidad de reacción y la previsión ante cualquier eventualidad en la ruta.

Desde la Subsecretaría de Tránsito y Transporte de la Municipalidad de San Carlos de Bariloche, el trabajo es constante en materia de prevención y educación vial. Se reconoce la responsabilidad de forjar un entorno seguro, con el esfuerzo enfocado en que nuestra ciudad sea cada vez más confiable, tanto para quienes la habitan diariamente como para los turistas que llegan a disfrutar de sus paisajes.

El mensaje que queda resonando tras esta jornada es firme y claro: el uso del cinturón es un acto de compromiso con la propia vida y la de los acompañantes. Y la seguridad vial, más allá de la normativa, es una responsabilidad compartida que, con conocimiento y respeto a las reglas, asegura un viaje placentero y sin sobresaltos para todos.

La entrega de folletería, sumada a la interacción directa y el cuestionario rápido, son ejemplos concretos del esfuerzo municipal por acercar la educación vial a la ciudadanía de forma activa. Con cada acción de prevención se busca consolidar una cultura de respeto mutuo en las calles, donde la prudencia sea la regla y no la excepción.

nestor